A 20 años de ganar por primera vez las elecciones de su país, Luiz Inácio Lula da Silva, de 77 años, fue proclamado presidente junto a su vice, Geraldo Alckmin, al pronunciar su “compromiso constitucional”.
La ceremonia dio inicio con un minuto de silencio en recuerdo del exastro brasileño Pelé y de Benedicto XVI, ambos fallecidos esta semana a los 82 y 95 años, respectivamente.
Con una vestimenta azul y blanco, Lula prometió en su primer discurso “reconstruir” el país sobre las “ruinas” del legado de Bolsonaro.
“Vaciaron los recursos de salud, desmontaron la educación, la cultura, la ciencia y la tecnología, destruyeron la protección del medio ambiente”, dijo Lula, que también reafirmó su compromiso de reducir a cero la deforestación en la Amazonía.
Al Congreso, Lula llegó en el tradicional Rolls Royce negro descapotable junto a la primera dama “Janja”, ante los vítores de sus seguidores, algunos de ellos con lágrimas en los ojos, constató la AFP.
Contrariamente a la tradición, su predecesor estuvo ausente. Bolsonaro viajó el viernes a Estados Unidos, dos días antes de finalizar su periodo de gobierno.
Por primera vez desde 1985, un mandatario saliente no pasará la banda presidencial, acto que tendrá lugar más tarde en el Palacio de Planalto.
Según una encuesta del instituto Datafolha del sábado, solo 51% de los brasileños considera que Lula gobernará mejor que Bolsonaro, informó el diario Folha de Sao Paulo.
Con información de AFP.