Puchunga y Vanessa perritas que el personal del Hospital Nacional de San Marcos habían adoptado desde hace un par de años, fueron víctimas de envenenamiento en varias ocasiones.
Las perritas estaban esterilizadas y eran alimentadas por el personal médico y administrativo del nosocomio.
El pasado 15 de septiembre personas inescrupulosas, por segunda ocasión las envenenaron, Puchunga corrió a pedir auxilio y fue llevada al veterinario y sobrevivió,
lamentablemente “Vanessa se escondió y fue encontrada demasiado tarde y falleció” comenta parte del personal del hospital.
“Las perritas no hacían daño y eran cariñosas” comentan algunos pacientes que han estado internados en el hospital.
El pasado 11 de noviembre Puchunga fue envenenada por tercera vez, en esta ocasión fue imposible salvarla, se refugió en la emergencia pediátrica y fue encontrada aún con vida, pero falleció en camino a la clínica veterinaria.
“Ella era mi compañía durante los turnos, la voy a extrañar” comenta entre lágrimas personal del hospital, refiriéndose a Puchunga.
Decreto 5-2017
En Guatemala fue aprobada la ley de Protección y Bienestar Animal, bajo el decreto 5-2017.
El envenenamiento tiene una sanción de 12 salarios mínimos.
En el Artículo 62, inciso M, dice claramente:
Infracciones gravísimas: Envenenar o intoxicar a un animal usando para ello cualquier sustancia venenosa o tóxica, sea de carácter líquido, sólido o gaseoso, volátil, mineral u orgánico, así como abandonar sustancias venenosas perjudiciales en lugares accesibles para las personas, animales o ambiente.
Las denuncias deben de ser recibidas en:
Sedes Departamentales del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA)
Municipalidades
Policía Nacional Civil
Con información de personal del Hospital Nacional de San Marcos Dr. Moisés Villagran