El alcalde de Nueva York, Eric Adams impuso el toque de queda, una nueva medida para los migrantes que residen en refugios administrados por la ciudad. Sin embargo, hay quienes aseguran que ya no podrán salir a trabajar de noche o madrugada, lo cual afectará sus bolsillos.
El toque de queda para inmigrantes de cuatro albergues en Nueva York entrará en vigor a partir de este martes.
Esto afectará alrededor de 1.900 migrantes alojados en centros de asilo, efectivo desde el 16 de enero de 2024, restringiendo su presencia en las calles entre las 23:00 y las 6:00 de la mañana.
Adams argumenta que esta medida busca abordar problemas de mendicidad y robos reportados por residentes.
Excepciones serán consideradas para aquellos con trabajos, estudios, viajes, citas legales o necesidades médicas.
Esta controvertida medida podría extenderse a otras ciudades estadounidenses, según Adams, quien ha presionado al presidente Biden para una legislación más estricta en el tema de migración ilegal.