En San Pedro Sacatepéquez, San Marcos, don Gonzalo Fuentes lleva más de 25 años perfeccionando el arte de fabricar barriletes, una tradición que en Guatemala va más allá del simple vuelo. Este país ha convertido los barriletes en símbolos de identidad cultural, especialmente en fechas como el Día de Todos los Santos (1 de noviembre), cuando los cielos se llenan de color y significado.
El significado del barrilete en Guatemala
El barrilete es una especie de cometa hecha de papel, nylon o tela, sostenida por un armazón de varillas. Su propósito no solo es volar, sino también honrar a los difuntos. En algunas regiones, como Sumpango y Santiago Sacatepéquez, se celebran festivales donde se elevan enormes barriletes, conocidos como barriletes gigantes, para comunicar mensajes de paz y espiritualidad con las almas de los que ya partieron. Estas festividades combinan el arte, la devoción y la conexión con los elementos naturales.
Los inicios de Gonzalo en el arte del barrilete
“Yo llevo aproximadamente 25 años en este precioso arte. Cuando las calles eran de piedra y no había construcciones, sino milpas y corrales de caña, comenzamos desde niños a fabricar barriletes. Íbamos a los corrales a buscar cañas secas, que luego quebrábamos para hacer las varillas. De esas mismas cañas sacábamos los arcos y los forrábamos con nylon o con papel china, que ya existía en ese tiempo”, recuerda Gonzalo con nostalgia.
El secreto de las zumbas: un sonido especial
“Les quiero contar algo muy bonito. En los barriletes, colocamos una ‘zumba’: es una tira de celoseda que, al volar, produce un sonido agudo con el viento. Antes, en lugar de celoseda, usábamos guías de ayote. Esas guías largas, que brotan en las milpas, las raspábamos con hojas de afeitar Gillette hasta dejarlas finas. El sonido que producían era algo hermoso y único.”
La precisión detrás de cada barrilete
“Este no es un trabajo fácil. Hacer un barrilete no es solo cruzar tres varillas y formar un hexágono. Debemos medir con exactitud, porque si uno de los lados tiene un centímetro más que otro, el barrilete se desnivela y no vuela bien. Es un arte que exige mucha paciencia.”
Barriletes para todos los gustos y edades
“Hoy en día, hago barriletes de distintos diseños, colores y tamaños. Algunos llevan los símbolos del Deportivo Marquense, Del deportivo San Pedro o Xela, otros tienen el diseño de los ’19 caracoles’ o el ‘caracol quebrado’. Hay infinidad de opciones tanto para niños como para adultos.”
Gonzalo invita a todos los interesados a visitar su lugar de exhibición, ubicado 35 o 40 metros aproximadamente del arbolón, en dirección al cementerio de San Pedro Sacatepéquez, San Marcos, en el cantón San Juan de Dios.
Un legado que sigue volando alto
“Les agradezco mucho por venir a hacer esta entrevista. Espero que esta tradición nunca se pierda, porque el barrilete no es solo un juguete, sino un arte lleno de historia y significado. Que Dios los bendiga, y estoy para servirles.”
El barrilete: más que un vuelo, una conexión espiritual
En Guatemala, volar barriletes se ha convertido en un puente entre generaciones y un ritual que une el cielo y la tierra. Cada vez que uno de estos vuela, especialmente en el Día de Todos los Santos, representa una conexión con los seres queridos que ya no están, enviando mensajes de amor y paz a través del viento. La labor de Gonzalo Fuentes refleja no solo la técnica artesanal, sino también el compromiso de mantener viva esta tradición que sigue inspirando a niños, jóvenes y adultos a mirar hacia el cielo con esperanza.