La Coordinadora Regional de Autoridades Comunitaria-Pueblos Fundadores (CRAC-PF), en la comunidad indígena Ayahualtempa, tomó como integrantes a un grupo de cinco niñas y 15 niños, a quienes “armaron”, para cuidar de su comunidad, en el municipio José Joaquín de Herrera del estado de Guerrero, en el sur de México, mientras un grupo de adultos salió a buscar a una familia desaparecida desde el pasado 19 de enero.
Los mejores fueron presentados como policías comunitarios, con rifles calibre 22 se dio a conocer que los infantes sólo realizarán tareas de vigilancia en esta comunidad, esto ante la ola de violencia que vive esta entidad del país debido al crimen organizado.
El integrante de la CRAC-PF, Luis Morales Rojas, miembro del Consejo del Gobierno Náhuatl, detallo que los jóvenes de mayor edad se sumarán a la búsqueda de las familia secuestrada, y que los demás harán labores de vigilancia.