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Cuatro niños que se encontraban vendiendo en la playa pública de Santo Tomás de Castilla en el municipio de Puerto Barrios, fueron rescatados y presentados por la Delegación de la Procuraduría General de la Nación PGN Izabal ante el Juzgado de Paz de Turno, en donde se solicitaron medidas de protección a su favor.
Se determinó que los niños son familiares, por lo que se entregaron con recurso idóneo. Según la investigación social, eran los progenitores quienes los mandaban a vender solos.